En un momento u otro de nuestra vida todo profesional nos hemos dicho qué cómodo y productivo sería trabajar desde casa, sin el estrés de las interrupciones, ruidos y demás particularidades de compartir oficina con otros compañeros. Lo cierto es que tener el puesto de trabajo en casa tiene sus ventajas, pero también algunos inconvenientes que, lejos de mejorar nuestra productividad, pueden empeorar nuestro desempeño profesional.

Cetelem Empleo - Trabajar desde casa

Con este artículo de Cetelem-Empleo queremos daros cuatro consejos a los que estáis por dar ese paso y empezar a trabajar desde casa. ¿Cómo ser más productivos?

  1. Reserva un espacio confortable y adaptado al trabajo en tu hogar. Diferencia entre los espacios de uso habitual de tu casa (la mesa de la cocina o el sofá) y el sitio en el que vas a trabajar. Tan importante es el orden como entender que tienes espacios separados y que existe ese límite entre la vida personal y la profesional, aunque tengan que convivir físicamente.
  2. Marca una rutina. Trata de ser regular en tu actividad diaria, diferenciando entre horas de trabajo y horas de descanso, y cumpliendo. Un horario adaptado a tus tiempos de mayor productividad y a tu vida personal mejorará enormemente tu desempeño profesional. Esa flexibilidad sin duda es una de las ventajas de trabajar desde casa, ¡aprovéchala!
  3. Evita las distracciones. Está claro que trabajando desde casa no vas a sufrir de manera tan evidente las interrupciones de compañeros de trabajo (las más frecuentes en una oficina). Sin embargo es mucho más sencillo que caigas en la tentación de chequear el email personal, las redes sociales o, incluso, de encender el televisor. Reserva algún momento al día para estas “distracciones” y sé muy estricto en no interrumpirte con ellas en las horas que has reservado para trabajar.
  4. Planifica tu tiempo de trabajo. Cuando se trabaja desde casa puede resultar a veces complicada la planificación de la agenda laboral. ¿Qué debería empezar haciendo hoy? Planifica con antelación lo que vas a hacer cada día, de manera que sepas en cada momento el siguiente paso que tienes que dar. No te sentarás en la mesa de trabajo perdido si eres capaz de ser ordenado con respecto a los proyectos pendientes y las tareas en curso. Utilizar aplicaciones de gestión de proyectos y/o tareas, por ejemplo, podría ayudarte a la organización.